Definir a Darío es hablar de pura energía, vitalidad, interés y también intensidad. Es un niño con una asombrosa capacidad comunicativa y de lenguaje, lo cual le permite estar en constante interacción y aprendizaje con otros niños, adultos y todo su entorno.

Se empapa constantemente de todo lo que le rodea… Es preguntón por naturaleza. Darío reta permanentemente, en el buen sentido de la palabra, su día a día, llenando sus momentos de ideas, iniciativas y vivencias, con pleno entusiasmo y ganas de todo. Acostumbra a sumergirse en procesos creativos, especialmente en casa, inventando de aquí para allá, formando un divertido mundo a su alrededor, ya sea a través de la música, el baile, el teatro, o también la pintura, la cocina o la decoración, que le entusiasma especialmente.

Desgasta parte de su arrolladora energía con deportes y juegos como natación o futbol. Y le gusta superarse así mismo adquiriendo poco a poco vocabulario y expresiones en inglés, o intentando desde ya leer carteles, interpretar señales y experimentando con juegos verbales de letras, sílabas y palabras.

Darío es muy versátil y apasionado. ¡Puro disfrutón!